Riego por inmersión: beneficios, técnicas y consejos

El riego por inmersión es una técnica altamente efectiva para mantener la hidratación adecuada de tus plantas. Este método consiste en regar las plantas desde el fondo de la maceta, permitiendo que el suelo absorba la humedad a través de los agujeros de drenaje. Es especialmente útil para promover sistemas radiculares saludables, prevenir el exceso de riego y reducir problemas de plagas. Esta guía cubre los beneficios, las plantas adecuadas y los consejos para un riego por inmersión exitoso.

¿Por qué elegir el riego por inmersión?

1. Estimula raíces profundas y sanas: el agua llega desde abajo, incentivando a las raíces a crecer hacia ella.
2. Evita el exceso de riego y pudrición: el sustrato absorbe solo lo necesario.
3. Garantiza una distribución uniforme de la humedad: proporciona humedad uniforme en todo el suelo, alcanzando toda la zona de las raíces.
4. Reduce la compactación del suelo: a diferencia del riego superior, que puede compactar la tierra.
5. Menos plagas: al no humedecer la superficie, se reduce la aparición de mosquitas del sustrato (hemos escrito sobre estas moscas aquí).

¿Qué plantas se benefician del riego por inmersión?

Este método no es para todas, pero sí ideal para:

1. Plantas con hojas vellosas: como la Violeta africana, que no toleran el agua en las hojas.
2. Plantas que prefieren hojas secas: Plantas como las sansevierias (lengua de suegra), Philodendron verrucosum y Philodendron micans son mejor regadas desde abajo para mantener sus hojas secas.
3. Plantas en mezclas sin suelo: Plantas cultivadas en mezclas sin suelo, como musgo de turba y perlita, se benefician del riego por inmersión ya que ayuda a humedecer el suelo de manera uniforme.
4. Plantas con cobertura densa de hojas: Para plantas con follaje denso, como ciertos tipos de helechos, el riego por inmersión es ventajoso ya que permite que el agua llegue al suelo sin tener que atravesar una capa gruesa de hojas.
5. Plantas con hojas o coronas delicadas: Plantas como los ciclámenes y las begonias, que pueden dañarse si sus hojas o coronas se mojan, son adecuadas para el riego por inmersión.
6. Plantas con suelo severamente seco: El riego por inmersión es efectivo para plantas con suelo extensamente seco, asegurando una hidratación completa del medio.
   
   🚫 Evita usarlo en suculentas y cactus. Prefieren un riego muy controlado desde la superficie, ya que son sensibles al exceso de humedad.

Paso a paso: ¿cómo hacer riego por inmersión?

1. Elige una maceta con drenaje: sin orificios, este método no funciona.
2. Prepara una bandeja o cubeta con 2–5 cm de agua.
3. Coloca la maceta en la bandeja durante 15–30 minutos.
4. Verifica la humedad con el dedo o un medidor.
5. Retira la planta y escurre bien el exceso de agua.
   
   💡 Tip: No dejes la maceta sumergida por más de 30 minutos para evitar encharcar las raíces.

¿Cuándo regar tus plantas por inmersión?

✔ Si ves el sustrato agrietado o extremadamente seco.

✔ Si la planta está marchita, pero el sustrato superior está seco.

✔ Si el sustrato no absorbe el agua desde arriba.

💡 Usa un medidor de humedad o pesa la maceta: si está muy liviana, probablemente necesite agua.

Consejos útiles para el riego por inmersión

• Monitorea los niveles de agua: Rellena la bandeja según sea necesario para mantener los niveles de agua.
• Usa agua a temperatura ambiente: El agua fría puede causar un shock a las raíces, así que utiliza agua a temperatura ambiente.
• Limpia la bandeja regularmente: Evita la acumulación de algas y bacterias limpiando la bandeja con frecuencia.
• Riego superior periódico: Aunque el riego por inmersión sea adecuado, riega la planta por la parte superior cada 4-6 meses para eliminar sales solubles de los fertilizantes. Riega hasta que el agua salga por los agujeros de drenaje y descarta el exceso de agua.
• Evita el exceso de riego: Evita el exceso de riego no dejando las plantas en un platillo con agua durante períodos prolongados. Unos minutos adicionales están bien, pero la inmersión prolongada puede causar problemas.
• Duración del riego: Generalmente, se necesita al menos 15 minutos para que el suelo se humedezca adecuadamente. Las macetas más grandes o los suelos más secos pueden requerir más tiempo.
• Frecuencia de riego: Adapta la frecuencia según las necesidades de la planta. Las plantas que requieren un suelo constantemente húmedo pueden necesitar riegos más frecuentes, mientras que las plantas resistentes a la sequía, como los cactus y suculentas, necesitan menos riego.

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